La Cámara de Armadores Poteros Argentinos, CAPA, y Sustainable Fisheries Parnership, SFP, presentan en Conxemar sus avances con el fin de lograr la certificación MSC del calamar argentino.
Foto: IP“Un ejemplo de vocación hacia un modelo de pesca que responde con las exigencias de los consumidores”. Con estas palabras se refirió el subsecretario de Pesca y Acuicultura de Argentina, Carlos Liberman, al FIP para la pesquería del calamar argentino (llex argentinus) que puesto en marcha por CAPA, la Cámara de Armadores Poteros Argentinos, con el respaldo de Sustainable Fisheries Parnership (SFP), cuyos avances se han dado a conocer en la primera jornada de la feria Conxemar. El objetivo final de este FIP es conseguir que la flota de CAPA, compuesta por 67 barcos, garantice los tres principios demandados por la certificación de pesquerías MSC sobre poblaciones sostenibles, impacto ambiental y gestión efectiva, abordando así las debilidades identificadas en la evaluación previa.
Juan Manuel Redini, presidente de CAPA, ha reconocido que “el FIP es un largo camino, pero estamos dispuestos a afrontarlo”. La iniciativa comenzó en 2019 y, desde entonces, se han dado pasos de cara a conseguir que, en el 2028, sus promotores puedan iniciar la transición al proceso completo de evaluación para la certificación pesquera del calamar argentino. Entre las tareas pendientes, está realizar en noviembre el primer reporte de avances ante la plataforma digital Fishery Progress -que aglutina los proyectos de mejora de pesquería activos en el mundo y permite seguir su evolución-, la búsqueda de financiación para seguir en la senda o la incorporación de embarcaciones poteras que estén fuera de CAPA. En este sentido, Redini ha solicitado el apoyo de más empresas a la iniciativa. “Es importante que todas pongan su granito de arena”.
“Nuestros hijos saben que lo que se consume debe provenir de una industria que se haga de forma responsable”, ha sentenciado el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Carlos Liberman
“Les felicito por el período en que se encuentran”, ha afirmado Carlos Liberman. “Nuestros hijos saben que lo que se consume debe provenir de una industria que se haga de forma responsable”, ha añadido, haciendo hincapié en que el sector argentino trabaja respetando los recursos marinos “que aseguran el presente y el porvenir”, apostilló.
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En total, 32 empresas aglutinan CAPA. Su flota, compuesta por 67 barcos, es responsable de la captura del 90 % de la captura anual del calamar que desembarca la flota argentina, que utiliza “poteras” para su captura. Cada campaña moviliza a 1800 trabajadores a bordo y otros tantos en descarga, transporte y procesamiento en tierra.
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En el evento de Conxemar también estuvieron presentes Luis García, director del departamento técnico de Conxemar; Gorka Azkona, responsable de Compras en Eroski y miembro del Comité de productos del mar de AECOC; y Antonio Álvarez, difector de Sotenibilidad de Profand.
“El FIP es claramente necesario”, ha señalado Luis García. En esta línea, ha resaltado la importancia económica y estratégica de la pota, tanto para Argentina como para España. También ha enfatizado la el peso que tienen las certificaciones hoy en día, destacando que este FIP “debe servir de ejemplo para proteger este tipo de recursos, que reportan beneficios para los países que los exportan y para los que lo comercializan”.
Por su parte, Gorka Azkona, ha indicado que “la pota es un producto saludable que puede ser muy versátil, económico y sostenible” y ha instado a los promotores del FIP a apostar por una estrategia de diferenciación para suscitar la atención en los consumidores finales.
En palabras de Antonio Álvarez, el programa impulsado por CAPA y SFP es “una oportunidad para no salir del mercado”, así como “un ejemplo a seguir a nivel mundial”
