El portal publicó el análisis realizado sobre las tendencias de pesca, especialmente sobre el Illex argentinus en el suroeste del océano Atlántico, tomando como base las capturas de la especie, calculadas a partir de bitácoras diarias registradas por barcos poteros de bandera taiwanesa entre los años 1998 y 2018.
El lugar apuntado para analizar fue el mar abierto del este de Argentina y el norte de la Zona donde toman como exclusiva el gobierno de las Islas Malvinas en el océano Atlántico sudoccidental.
El informe marca que “los cambios antropogénicos en los mares están remodelando las tendencias pesqueras, con importantes implicaciones para las fuentes de alimentos acuáticos a lo largo de este siglo.”
“Al examinar un conjunto de datos de abundancia de 21 años de calamares argentinos Illex argentinus junto con un análisis oceánico regional, observamos fuertes correlaciones entre la abundancia anual de calamares y la temperatura de la superficie del mar en enero y febrero y la energía cinética de remolinos de marzo a mayo en el Atlántico suroeste.”, indica el informe.
Un análisis más profundo reveló interacciones combinadas océano-atmósfera, identificadas como el modo principal en un análisis de función ortogonal empírica rotada de la temperatura de la superficie del mar.
“Este patrón produjo una temperatura en superficie más fría y una energía cinética de remolinos, amplificada en los mares circundantes, factores cruciales para las etapas de vida únicas de los calamares. Las proyecciones futuras indicaron que este patrón océano-atmósfera, conocido como patrón simétrico del Atlántico, persistiría en su fase fría de temperatura del mar, promoviendo una mayor abundancia de calamares”.
El aumento de la temperatura del mar, debido al calentamiento global, podría contrarrestar el aumento de la abundancia. “Nuestros hallazgos descubren un vínculo previamente no reconocido entre los calamares y las condiciones ambientales específicas regidas por interacciones más amplias entre el océano y la atmósfera en el Atlántico suroeste. La integración de estos conocimientos con proyecciones estacionales y decenales puede ofrecer información invaluable a las partes interesadas en la pesca del calamar y la conservación marina en un clima cambiante.”, destacaron quienes realizaron el informe.
Como indicamos, las series temporales de capturas de calamar se calcularon a partir de los cuadernos de pesca diarios registrados por los buques poteros taiwaneses entre 1998 y 2018 en el mar abierto al este de Argentina y al norte de las zonas de las Islas Malvinas en el Atlántico sudoccidental, que era una zona de calidad controlada.
recopilación de datos pesqueros regionales, en la zona de pesca que se extiende principalmente desde el 34°S a 55°S y desde 50°O a 70°O, donde cubría aproximadamente el rango de distribución del calamar argentino Illex.
Las series temporales de abundancia del Illex argentinus en el Atlántico sudoccidental mostraron dinámicas mensuales y fluctuaciones cuasicíclicas anuales, dice también el informe, a la vez que sostiene que la abundancia más alta apareció en 1999, 2007, 2014 y 2015, mientras que la abundancia más baja ocurrió en 2004, 2009, 2010 y 2016.
Para minimizar los efectos de la duración de la temporada de pesca, simplemente se sumó la abundancia diaria de calamar durante el período de pesca principal, es decir de marzo a mayo, lo que representa entre el 34,4% y el 94,1% de la captura total de la flota potera taiwanesa.
Los autores del informe demostraron cómo los recientes cambios oceánicos y atmosféricos alterarían continuamente las tendencias espacio-temporales de la abundancia anual de calamares en el Atlántico suroeste.
Además examinaron la cuestión usando tendencias de abundancia multi decenales más recientes de calamares con aspectos espaciales, en lugar de la práctica típica de examinar colectivamente las tendencias de las especies a largo plazo, generalmente durante un cuarto de siglo.
Mientras tanto, en nuestro país y en forma azarosa, -pues nadie pudo predecir el comportamiento de la especie previo a la zafra-, la misma se está dando en un marco sólido, con importantes concentraciones de calamar, grande para la época -y ahí lo inexplicable- que marcó desde el comienzo una temporada, por el momento, firme, con excelente nivel de descargas (algunos poteros ya están descargando la segunda marea de 650Tn) y con un calamar de excelente calidad y superlativo tamaño para esta época del año, en su mayoría M y algunos L, que comparado a las zafras de los años anteriores está varios peldaños más arriba.