Si bien el puerto deseadense se halla con escaso movimiento de descargas, por estos días la gran actividad se centra en las reparaciones que se realizan a bordo de los buques poteros que operan de manera selectiva sobre el calamar.
Soldadores, carpinteros, electricistas, operarios con oficios múltiples se adueñan de la escena y sólo basta caminar por el muelle para escuchar el ruido de las máquinas en plena tarea.
“Estamos haciendo trabajos de soldadura, pero se trabaja en la planta y también en los camarotes, siempre hay algo para hacer, son reparaciones menores pero el tiempo apremia porque queda un mes para el inicio de la temporada”, señaló a Mar&Pesca un trabajador a punto de subir la empinada escalera del Vieirasa Diecisiete ubicado en primera andana.
“También estuve realizando trabajos en el Espadarte, que es Pesquera Deseado, hay mucha gente trabajando en todos los poteros, incluso empresas que vienen de Puerto Madryn y de Mar del Plata”, detalló el trabajador.
En tanto desde Pesquera Deseado, confirmaron que la actividad de puesta a punto de los buques es intensa. “Se están realizando varios trabajos y siempre se supervisa para que cumplan con las medidas de seguridad, por suerte siempre cumplen”,indicó una empleada de la compañía al señalar que la salida de los barcos será para los primeros días de enero.